jueves, 20 de junio de 2013

Polémica 'Mundial': Pelé pide abandonar las protestas y Romário lo manda a callar


Pelé y Romário, dos de las figuras más representativas del fútbol brasileño, han vuelto a protagonizar una nueva polémica, en esta ocasión en las discusiones entre los internautas en torno a las protestas que tienen lugar en Brasil.

'El Rey' Pelé ha pedido a los brasileños en un vídeo colgado en Internet que abandonen las protestas y se concentren en los preparativos del Mundial 2014 y en la Copa Confederaciones, que se está celebrando estos días en Brasil. 


"Pido a los brasileños que no confundan las cosas. Estamos preparando la Copa del Mundo. […] Vamos a apoyar a la selección nacional. Es nuestro país, es nuestra sangre. Vamos a poner fin a la confusión que reina en Brasil", dice en el vídeo.



Estas declaraciones desataron una gran cantidad de comentarios sobre 'El Rey' del fútbol que aseguran que este no sabe cómo viven los brasileños corrientes, citando además la frase que Romário pronunció años atrás, "Pelé callado es un poeta", antes de la cual afirmó que Pelé "habla tanta m… cada día. […] No es consciente de lo que pasa en el país". Muchos usuarios de las redes sociales recordaron esta frase como la más representativa para la situación que vive Brasil.


El aumento del precio del transporte público ha sido la chispa que ha provocado las multitudinarias manifestaciones sociales, que también cuestionan el elevado gasto que supone la organización de la Copa Confederaciones y el Mundial del año que viene, ya que mucha gente cree que hay necesidades más importantes en el campo de la salud, de la educación o del transporte.  

Dueño de Fox Sports propone una Champions mundial en verano


Según publica el rotativo británico ‘The Guardian’ el magnate de los medios de comunicación Rupert Murdoch planea organizar un torneo de verano entre los 16 mejores clubes de fútbol de Europa. El torneo tendría lugar en distintas ciudades del mundo entre temporada y temporada.
La propuesta de Murdoch se asienta sobre su imperio de televisiones en todo el mundo, propietarias de los derechos de retransmisión desde rincones tan diversos como ShangáiBuenos Aires o Los Ángeles. La idea es contar anualmente con los mejores equipos de fútbol continentales, como Manchester UnitedBarcelonaReal MadridChelseaBayern de MúnichMilan, etcétera.
El proyecto no obstante no quedaría ahí y dista de ser un interesante torneo estival de preparación. Antes bien se trata de una propuesta más ambiciosa que pretende instalarse como competición regular en el calendario internacional. Una posible fecha de inicio sería el próximo verano de 2015.
Al parecer la propuesta final se resume en la “fundación de una Fórmula 1 en el mundo del fútbol”. De manera que distintas ciudades pujen entre ellas para convertirse en sedes de la competición, al modo de los Grandes Premios del motor.
De llevarse a cabo la propuesta de Murdoch estaríamos ante el embrión de lo que pudiera ser en el futuro una Superliga mundial del fútbol.

miércoles, 19 de junio de 2013

Violenta batalla campal en Fortaleza antes del partido entre Brasil y México


La ciudad de Fortaleza fue este miércoles escenario de una violenta batalla campal entre la policía y unos 40.000 manifestantes antiMundial, en un enfrentamiento ocurrido en las inmediaciones del estadio Castelao, pocas horas antes del partido Brasil-México por el Grupo A de la Copa Confederaciones.
Piedras, gases lacrimógenos, balas de goma y autos quemados fueron el símbolo del conflicto entre protestantes y las fuerzas de seguridad, tres horas antes de que se iniciara el encuentro.
Según informó el coronel de la Policía Militar Joao Batista, unos 40.000 manifestantes se hicieron presentes en la Avenida Alberto Craveiro para reclamar ajustes sociales y hacer público su rechazo hacia los millonarios gastos públicos para preparar la Copa Confederaciones y el Mundial de fútbol del próximo año bajo el lema 'Más pan, menos circo'.
La protesta comenzó a gestarse cerca de las diez y media de la mañana en medio de un clima pacífico. Hasta el mediodía, los manifestantes se posicionaron a dos kilómetros del estadio Castelao para realizar cantos en contra de la presidenta Dilma Roussef y del Mundial de fútbol.
Los manifestantes cerraron varias vías de acceso al estadio, y obligaron incluso a los vehículos oficiales de la FIFA a buscar rutas alternativas para llegar al Castelao, protegido por la policía local y por efectivos de la Fuerza Nacional de Seguridad enviados a la capital del estado de Ceará.
Según informó Batista, el reclamo era pacífico hasta que un grupo de "infiltrados" logró derribar las rejas que separaban a los participantes del acto de la avenida que conduce al estadio.
A partir de ahí, el grupo se refugió en un área de construcción y pasó a lanzar piedras contra la policía, que reaccionó lanzando bombas de gas lacrimógeno y spray pimienta y disparando balas de goma, que causaron heridas a manifestantes. Varios agentes también resultaronheridos por piedras, y al menos un automóvil de la guardia civil fue incendiado por los participantes del acto.

Atrapados en las protestas

Muchos hinchas brasileños y mexicanos que buscaban llegar al estadio para el partido se vieron atrapados en el enfrentamiento, y algunos de ellos desistieron de ver el partido, según informaron medios de la prensa local.
Las fuerzas de seguridad también embistieron contra representantes de la prensa que intentaban cubrir la protesta, y al menos dos fotógrafos -un alemán y un francés- denunciaron que policías llegaron a amenazar a sus colegas con pistolas y fusiles para que abandonaran el lugar.
A raíz de los enfrentamientos, la FIFA orientó a los los seleccionados de Brasil y México a adelanter su traslado desde los hoteles hasta el Castelao, según informó a la agencia dpa una fuente vinculada a la organización.
La violenta manifestación en Fortaleza se encuadra en el marco de una ola de protestas que estalló en varias partes de Brasil poco antes del inicio de la Copa Confederaciones.
El estallido llevó hasta ahora a las calles a cientos de miles de personas con las más diversas demandas, pero que coinciden en criticar los gastos públicos con la preparación del Mundial de 2014 en un país que enfrenta graves baches en los sistemas de salud, educación y transporte público.

lunes, 17 de junio de 2013

Turquía acoge el Mundial Sub-20 en un clima político de alta tensión


Turquía se prepara para acoger desde este viernes y hasta el 13 de julio el Mundial Sub-20 de fútbol, su primera gran cita FIFA, y lo hace en plena crisis interna por la oleada de protestas y manifestaciones que se viven en las últimas semanas contra el gobierno del país.
Las imágenes de la policía reprimiendo con cañones de agua y gases lacrimógenos las protestas en la emblemática plaza Taksim y el vecino parque Gezi han dado la vuelta al mundo, han provocado protestas internacionales y han sembrado de preocupación la cuenta atrás para el torneo.
Ante las dudas por la evolución de las protestas, la Federación Internacional de Fútbol (FIFA) emitió un comunicado la pasada semana diciendo que el torneo iba a disputarse según los planes previstos y envió además una circular a los equipos participantes, garantizándoles que estarán seguros en Turquía.
“Considerando las últimas noticias sobre las protestas en Turquía, les informamos que la situación no tendrá consecuencias negativas para el torneo Sub-20 de la FIFA, que se celebrará tal y como estaba previsto”, escribió en esa carta el secretario general adjunto del organismo, Markus Kattner
La FIFA dio garantías a los participantes de que las autoridades locales les habían transmitido que protegerán el correcto desarrollo de la competición deportiva, en un año en el que Estambul está en plena recta final para saber si es elegida como sede de los Juegos Olímpicos de verano de 2020.
“La Policía Nacional turca ha confirmado al cuerpo de seguridad del COL (Comité de Organización Local) que velará por la seguridad durante la competición de la FIFA en Turquía y que no habrá peligro alguno en las sedes, los hoteles de concentración o las instalaciones deportivas”, añadió Kattner.
El último balance del sindicato de médicos turco habla de cuatro muertos desde el inicio de las protestas hace dos semanas y casi 7.500 heridos. Las principales protestas se han vivido en Estambul, pero también ha habido manifestaciones en otras ciudades del país, como Ankara o Esmirna, aunque esas dos últimas no forman parte de las sedes donde se jugará el Mundial Sub-20.
Este fin de semana, la situación ha vivido nuevos episodios, con actos de apoyo al primer ministro Recep Tayyip Erdogan organizados por el gobierno en Ankara y Estambul, y sobre todo el desalojo hacia las 19h00 GMT del sábado del parque Gezi, el último bastión de los manifestantes en Estambul.
Según el colectivo de manifestantes Solidaridad Taksim centenares de personas resultaron heridas en la operación. El gobernador de Estambul, Huseyin Avni Mutlu, evaluó el domingo los heridos en 44.
Desde entonces se han producido escaramuzas y protestas en otros puntos de la ciudad, como reacción a la intervención policial. Un colectivo de sindicatos convocó además una huelga general para este lunes.
Unos días antes, la policía había desalojado a los manifestantes de la plaza Taksim, también con cañones de agua y gases lacrimógenos, lo que ya había motivado varias protestas internacionales, especialmente desde la Unión Europea.
En el origen de las protestas estaba la represión policial a un grupo de ecologistas que intentan evitar la destrucción anunciada del parque Gezi y de sus 600 plátanos, en el marco de un cuestionado proyecto urbanístico en la plaza Taksim, un símbolo nacional.
La indignación provocada por esa operación motivó la más importante ola de protestas contra el gobierno islamista conservador turco desde que llegó al poder hace una década. Las decenas de miles de manifestantes exigen la dimisión de Erdogan, acusado de autoritarismo y de querer islamizar la sociedad turca.
La FIFA ha insistido en que continuará vigilante de la situación y facilitará información sobre seguridad por estos hechos a los integrantes de los equipos participantes, durante la tradicional reunión de bienvenida.

domingo, 16 de junio de 2013

Continúan protestas por gasto público en Brasil


BRASILIA, 16 de junio.–Por sexto día consecutivo, Brasil vivió ayer una jornada de protestas, concentradas en esta ocasión en la capital, donde cientos de personas chocaron con la policía en plena inauguración de la Copa Confederaciones de futbol.
La manifestación en los alrededores del estadio Nacional, en el que jugaban las selecciones de Brasil y Japón, congregó a unas mil 200 personas y dejó al menos 27 heridos y 16 detenidos. La policía usó gases lacrimógenos y balas de goma para dispersarlos.
Los participantes vulneraron el fuerte esquema de seguridad que supuso el despliegue de diez mil policías y soldados de las tres fuerzas armadas.
Esas tropas tenían apoyo de helicópteros y hasta de un avión no tripulado, equipados con cámaras que registran todos los movimientos en un perímetro de unos tres kilómetros en torno al estadio y que las envían en tiempo real a un moderno centro de control inaugurado el pasado jueves por la presidenta Dilma Rousseff.
Las refriegas entre policías y manifestantes ocurrieron a las puertas del estadio y crearon cierta zozobra entre las decenas de miles de hinchas que se dirigían hacia el coliseo de la capital, muchos de los cuales ingresaron al recinto a las prisas y con el miedo estampado en sus rostros.
Cuando comenzaba la ceremonia de apertura en el interior del estadio, la calma que había imperado en los primeros momentos de la protesta se acabó y dio paso a la violencia, cuyo origen no quedó muy claro, pero que incluyó una severa carga de la policía contra los manifestantes.
La Secretaría de Seguridad de Brasilia informó que 16 personas fueron detenidas y que en los enfrentamientos resultaron heridos 23 manifestantes y cuatro policías, ninguno de ellos de gravedad.
La protesta fue convocada por movimientos sociales que critican el elevado gasto público en el torneo organizado por la FIFA, en un país con una salud y educación pública deficientes y en el que muchos no tienen acceso a los servicios básicos.
El Movimiento Sin Techo, uno de los organizadores, denunció que en Brasil unas 50 mil personas viven en las calles y, sin embargo, “el gobierno gasta millones en la construcción de estadios”.
Ese malestar se vio reflejado en muchas de las pancartas que exhibieron los manifestantes, que brincaban al grito de “quien no salte es de la FIFA”.
“Dinero para la salud y la educación, no para el futbol” y “Si tu hijo se enferma lo tendrás que llevar al estadio” eran algunas de las frases escritas en los carteles.
Otros carteles expresaron la “solidaridad” de los manifestantes con las miles de personas que en los últimos días han protestado en Sao Paulo, Río de Janeiro y otras ciudades del país contra recientes aumentos en las tarifas del transporte.

Dilma Rousseff y Joseph Blatter fueron abucheados en la Copa Confederaciones (Video)

La jefa de Estado brasileña, Dilma Rousseff, y elpresidente de la FIFA, Joseph Blatter, inauguraron la Copa Confederaciones en medio de un sonoro abucheo de parte de los asistentes al Estadio Nacional de Brasilia.
Bajo estruendosos gritos de desaprobación,Blatter declaró que la FIFA y los aficionados "están todos unidos para una fiesta del fútbol en el país pentacampeón" y expresó su "placer" por darle la "bienvenida" al estadio a "las autoridades brasileñas y a la presidenta Dilma Rousseff".
El abucheo no cesaba y el timonel del organismo rector del fútbol increpó al público: "Amigos brasileños, ¿dónde está el respeto al fair play?", tras lo cual pasó la palabra a Rousseff, quien no disimulaba su malestar.
"Declaro oficialmente abierta la Copa de las Confederaciones 2013", dijo solamente la presidenta, con el disgusto estampado en el rostro.
Tras esas breves palabras, los himnos de ambos países silenciaron las protestas, con ambos equipos ya en campo.