Rosales visitó los estudios de Cadena 3 y contó pormenores de su actividad ilícita y ofreció a la Justicia ese libro.
"A la Justicia se le hace muy difícil investigar yo les doy el manual para hacer las trampas" , dijo.
También hizo hincapié en que una cosa es la "equivocación humana y otra cosa es la parte dolosa".
Rosales no teme ir preso porque asegura que todos los hechos que denunció en su libro "han prescripto porque son cosas que pasaron hace más de 15 años".
Sobre las consecuencias de su actividad ilícita, pidió disculpas a los hinchas, los jugadores y los clubes "pero no a los dirigentes".
"San Martín de San Juan fue descendido y lo descendieron a través de arbitrajes desastrosos. Sus directivos lloran como mujer lo que no saben defender como hombres", aseguró.
"Un árbitro que beneficia a un equipo y perjudica a otro es un incentivador de la violencia", sentenció el ex árbitro.
"El soborno es una institución dentro del fútbol argentino porque detrás de eso están los directivos y los directivos forman parte del Gobierno", dijo.
Rosales hace 18 años que se desvinculó del arbitraje y asegura que muchas veces le ofrecieron volver.
"Ahora soy abogado y desde que me retiré de mi profesión de árbitro, ejerzo mi profesión de abogado penalista con toda la honestidad posible", aseguró Rosales.
"Tambien estoy en un área de control de la Municipalidad. Hace 18 años que estoy allí"
"No voy a la cancha, sino que miro los partidos por TV y ya sé qué cobrará un árbitro y si el partido está arreglado", aseguró.
Consultado sobre si los partidos de Talleres en los que le cobraron penales a su favor hubo arreglo, Rosales fue contundente: "No me interesa nada de la actualidad".
"No opino de Talleres porque a la cancha no voy más", agregó.
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