La ciudad de Singapur puede presumir ahora de un estadio que marca una novedad absoluta en cuanto a recintos deportivos. En la Bahía Marina de su ciudad, han construido un campo de fútbol suspendido sobre el agua y unido de la costa, donde se encuentran las gradas, por tres pasillos. La instalación da cabida a nada menos que 30.000 espectadores y ha albergado acontecimientos importantes de otros deportes; mientras que está previsto que próximamente sea el escenario de un partido internacional de la selección de Singapur. Ese sería el primer partido de fútbol que se celebraría en el Marina Bay Floating Stadium, puesto que no hay ningún club que juegue ahí y la final de la copa de fútbol del año pasado se canceló por un problema de resistencia de los pasillos que dan acceso al campo.
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