SAO PAULO, 18 (ANSA) - El mítico estadio Maracaná de Rio de Janeiro, donde se jugará la final del Mundial de Brasil 2014, comenzará su proceso de privatización el lunes, con el llamado a licitación a las empresas que quieran adquirirlo en concesión, anunció hoy el gobernador carioca, Sergio Cabral.
El estadio, que fue construido para el Mundial 1950, es propiedad del gobierno del estado de Rio de Janeiro y será entregado en concesión luego de la reforma emprendida por el poder público, de cara a la Copa del Mundo de 2014.
"Invito a las empresas a participar de la licitación, porque el Maracaná puede dar una alta rentabilidad, no por el valor del ingreso al estadio, sino por su atractivo como un lugar de eventos, shows y entretenimiento", comentó Cabral.
El gobierno no dio detalles sobre el plan de privatización del mítico estadio, donde brillaron las máximas estrellas brasileñas y que fue escenario de la mayor decepción colectiva de la historia del país: la derrota en la final de 1950 ante Uruguay por 2-1, episodio recordado como el "Maracanazo".
Según versiones de la prensa local, la concesión a la iniciativa privada debería ser por un período cercano a los 30 años.
Uno de los interesados en adquirir la concesión del estadio es el empresario Eike Batista, el hombre más rico de Brasil que es un "player" del sector petrolero y minero.
Cabral dijo que "no hay tiempo que perder" porque el estadio necesita estar operativo para la Copa de las Confederaciones del próximo año.
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